Las secuelas que los trastornos neurológicos causan a las personas suelen ser graves, con efectos en la calidad de vida del paciente y de quienes lo rodean. Pero cuando esta afección se da en adultos mayores, las consecuencias pueden profundizarse y derivar en una discapacidad.
Según el Servicio Nacional de la Discapacidad, esta condición se refiere a la interacción entre las personas con deficiencias y las barreras que evitan su participación plena y efectiva en la sociedad, en igualdad de condiciones con las demás.
En el caso de los adultos mayores, una enfermedad neurodegenerativa o un trastorno neurológico puede generar dependencia funcional, que es el estado de carácter permanente en que se encuentran las personas que requieren de la atención o ayudas importantes para realizar las actividades esenciales de la vida.
Debido al deterioro natural del cuerpo, que aumenta la prevalencia e intensidad de condiciones de salud, la dependencia funcional se incrementa desde los 60 años en adelante, y su severidad se acrecienta conforme pasan los años.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) remarca que, en 2019, las cuatro causas más frecuentes de discapacidad fueron la cardiopatía isquémica, los accidentes cerebrovasculares, el mal de Alzheimer y otras demencias, y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
En el caso de Chile, el Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidente Cerebrovascular plantea que las personas mayores de 65 años tienen un riesgo siete veces mayor de sufrir un ACV.
Además, en nuestro país el 75% de los mayores de 65 años sufre hipertensión, principal factor de riesgo relacionado con esta patología.
Con un riesgo mayor de sufrir un accidente cardiovascular, los adultos de edad avanzada pueden verse especialmente afectados por las secuelas funcionales de esta patología , entre las que se encuentran:
Con el paso de los años también pueden presentarse otras patologías neurológicas, como la enfermedad de Parkinson o la esclerosis múltiple (EM)
La enfermedad de Parkinson es un trastorno progresivo y degenerativo que afecta el sistema nervioso y que puede llegar a ser muy incapacitante.
Los síntomas aparecen lentamente y el primero suele ser un temblor apenas perceptible en una sola mano. Los temblores son habituales, aunque el trastorno también puede causar rigidez o una disminución del movimiento.
La edad es un factor relevante, ya que, por lo general, esta patología comienza aproximadamente a partir de los 60 años, y el riesgo aumenta a medida que las personas envejecen.
Por otra parte, la esclerosis múltiple es una enfermedad que afecta al cerebro y a la médula espinal y que puede provocar una gran variedad de signos y síntomas, como debilidad, entumecimiento, temblores, generando una importante discapacidad.
En ella, el sistema inmune ataca la vaina protectora que recubre las fibras nerviosas, conocida como mielina, y causa problemas de comunicación entre el cerebro y el resto del cuerpo.
Su aparición suele ocurrir entre los 20 y 40 años. Sin embargo, pueden verse afectadas personas de menor y mayor edad.
Frente a estos trastornos o enfermedades, es relevante que los adultos mayores accedan a una rehabilitación especializada como es la kinesiología geriátrica o fisioterapia geriátrica.
Frente a problemas neurológicos, la rehabilitación enfocada en los adultos mayores ofrece los siguientes beneficios:
La terapia ocupacional en adultos mayores es un enfoque terapéutico diseñado específicamente para ayudar a mantener su autonomía, independencia y calidad de vida, junto con prevenir o tratar problemas de salud relacionados con el envejecimiento.
Esta disciplina permite que los adultos mayores puedan mantener y mejorar sus habilidades motoras y cognitivas.
Beneficios de la terapia ocupacional en adultos mayores con trastornos neurológicos:
TrainFES cuenta con un equipo multidisciplinario en que médicos fisiatras y terapeutas ocupacionales cumplen un rol fundamental, acompañados por kinesiólogos, fonoaudiólogos y psicólogos, con miras a buscar una rehabilitación integral.
Además, la tecnología de vanguardia del sistema permite ofrecer una opción especialmente útil para personas mayores que sufran de las secuelas de un ACV o de enfermedades neurológicas, que muchas veces tienen dificultades para desplazarse, como es la telerehabilitación.
Esto es posible gracias a la electroestimulación funcional, técnica terapéutica que utiliza corrientes eléctricas para estimular nervios y músculos, con el objetivo de restaurar o mejorar la función motora en pacientes con diversas condiciones neurológicas.
Para una telerehabilitación exitosa es fundamental contar con el equipamiento tecnológico adecuado. En el caso de TrainFES, el programa incluye asesoría profesional personalizada y evaluaciones clínicas, junto con el dispositivo móvil para la aplicación de la electroestimulación funcional y sensores inteligentes, que se combinan para activar la neuroplasticidad.
Además, el método de telerehabilitación incorpora principios de biofeedback, para medir diferentes respuestas fisiológicas frente a determinados estímulos y ayudar a las personas a tener un mejor control sobre sí mismas.
La neurorehabilitación busca ayudar a la recuperación de una lesión del sistema nervioso, y minimizar las alteraciones funcionales.
La neurorehabilitación de TrainFES se basa en la neuroplasticidad, que es la capacidad de las neuronas para adaptarse y reaprender funciones de otras neuronas dañadas debido a una lesión, para apoyar la recuperación y mejorar la calidad de vida de las personas.
TrainFES plantea un nuevo estándar de rehabilitación para usuarios con compromiso motor, con una metodología de neurorehabilitación que, utilizando la técnica de electroestimulación funcional junto a entrenamientos a lo largo de todo el año, permite obtener mejores resultados en menor tiempo.
TrainFES fomenta el reaprendizaje motor con el objetivo de recuperar funciones perdidas debido a patologías del sistema nervioso, obteniendo beneficios motores, metabólicos o evitando complicaciones secundarias
Con la innovación tecnológica, el acompañamiento médico y la plataforma de rehabilitación virtual que impulsa el entrenamiento en casa, el programa permite realizar hasta 10 veces más terapias efectivas que con un método convencional, con un potencial de recuperación igual o mejor que en un programa presencial.
La rehabilitación es un anhelo para todos quienes han sufrido alguna discapacidad producto de lesiones, trastornos neurológicos o enfermedades neurodegenerativas. Cuando una patología se extiende en el tiempo se transforma en crónica, y genera diversos efectos que pueden empeorar, desde pérdida del movimiento hasta dificultad para realizar actividades de la vida diaria como desplazarse, alimentarse o ir al baño.
¿Qué hacen pacientes que han sufrido afecciones como ACVs, parálisis cerebrales y lesiones medulares para seguir con su rehabilitación?
Las personas con discapacidad son aquellas que, en relación con sus condiciones de salud física, psíquica, intelectual, sensorial u otras, al interactuar con diversas barreras contextuales, actitudinales y ambientales, presentan restricciones en su participación plena y activa en la sociedad.