Un infarto medular ocurre cuando hay una reducción del flujo sanguíneo al interior de la columna vertebral, es decir, como resultado de una isquemia originada en una arteria extravertebra
Una persona con parálisis o dificultad para moverse ve afectada la realización de actividades de la vida diaria, que pueden ir desde el traslado hasta alimentarse o ir al baño en forma independiente, lo que además de las secuelas físicas puede traer problemas psicológicos y trastornos del ánimo.
Distintos grados de parálisis motora, problemas de movilidad, dificultad para tragar o daños progresivos en el equilibrio, la coordinación, la vista y el habla son secuelas derivadas de alteraciones neurológicas, que pueden producirse por trastornos como accidentes cerebrovasculares o enfermedades como el mal de Parkinson o la esclerosis múltiple.