¿Cómo es rehabilitarse con TrainFES desde otro país?

El año 2014, María René Zegada sufrió un accidente cerebrovascular que la dejó con la mitad del cuerpo inmovilizado. Desde ahí ha hecho fisioterapia, hidroterapia y todo lo que le recomendaran.

El año pasado, una de las hermanas de María René tuvo un accidente y se rompió la cadera. La operaron en Bolivia, pero los resultados no fueron los mejores, sobre todo por el intenso dolor con el que quedó. Como ella vivió por 7 años en Chile, decidió viajar a atenderse aquí. En su recuperación, vio el tratamiento de TrainFES en la televisión y le llevaron los detalles de esta alternativa a María René.

Entonces programó su visita y viajó a Chile a conocer el equipo y para llevárselo a su ciudad si es que le gustaba. “Me hubiera gustado quedarme en Santiago dos o tres meses. Solo estuve 15 días, pero aceleramos el proceso. Ocupamos los días lo máximo posible”, cuenta desde Trinidad. Luego de ese primer acercamiento, compró el equipo y se lo llevó a Bolivia. Ahora, que realiza los entrenamientos de manera remota destaca que su kinesióloga siempre está disponible para resolver sus dudas. Con ella tiene entrevistas por videollamada, en las que le explica nuevos ejercicios. “Yo le mando videos de cómo estoy caminando y le digo ‘siento que todavía me falta esto’. Ella me sigue guiando”, explica. 

Debido a la cuarentena, llegó a Santa Cruz y no pudo retornar inmediatamente a su ciudad, Trinidad. “Estuve 5 meses en Santa Cruz, entrenando en la casa de mi hija. He tratado de hacer lo mejor posible, porque mi intención era aparte de estar con el equipo y las indicaciones de la kinesióloga de TrainFES, quería una entrenadora personal. Pero con el Covid-19 no puedo meter a nadie a mi casa por el riesgo para mí y mi familia. Creo que con el apoyo de un profesional al menos tres veces por semana sería aún mejor”.

A pesar de que es usuaria reciente de TrainFES, entiende que la clave es la disciplina. “Al principio, tienes la idea de que te pondrás el equipo y vas a salir corriendo, pero todo lleva un sacrificio. El equipo fortalece más rápido los músculos, ayuda a hacer la actividad con mayor intensidad. Por ejemplo, yo no tengo el movimiento del pie; no tengo la fuerza suficiente para levantarlo y no la tenía para levantar la rodilla. De a poco fue avanzando la fuerza para mover la rodilla. Ahora tiene mejor movimiento. Como tengo el pie caído, me ayuda a levantarlo”. 

Principales avances con TrainFES

A pesar de que siente el progreso, son sus familiares los principales testigos de sus avances. Por ejemplo sus hijos celebran al verla levantar cada vez más la rodilla. Y agrega: “En mi ciudad las veredas no son parejas, por lo que el pie caído es una complicación. Por eso no he podido practicar, ni salir. Pero a los pocos lugares que voy, dada la cuarentena, siento que tengo mayor firmeza, más equilibrio, mejor movimiento”.

Uno de los principales desafíos de María René es el desplazamiento. Si bien en su casa o zonas de confort no tiene problemas, al salir de la casa aún tiene bloqueos. “Me pongo nerviosa o no sé qué me pasa que no puedo avanzar. La kinesióloga de TrainFES me recomendó la ayuda de un psicólogo, por lo que también empecé con esta terapia online. En TrainFES también cuentan con fisiatra, por lo que tendré cita con él por este problema puntual”. La idea es que cada paciente pueda recibir un apoyo integral en su tratamiento. 

Para cerrar su testimonio, hace hincapié en la energía y constancia que los pacientes deben tener durante su rehabilitación. “Creo que si hubiera tenido este equipo antes, mi resultado hubiera sido mejor. Pero no hay que desanimarse, hay que salir adelante e intentar. No hay que rendirse”. 

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